El Lindy Hop es el alma del swing, es su baile original por excelencia. Ningún otro estilo es tan movido, loco, heterogéneo y divertido como el Lindy, y por eso no ha parado de bailarse desde que nació.
Sin embargo, aunque es un baile tan famoso y de tan largo recorrido, cuesta un poco pillarle el truco, ya que es uno de los estilos más difíciles en cuanto a habilidades técnicas y de conexión. Eso sí, la recompensa cuando empezamos a bailarlo con libertad y soltura ¡no tiene precio!
¿Sabíais qué? Se dice que el nombre de “Lindy Hop” surgió en el salón de baile Savoy, en conmemoración del famoso vuelo que el ingeniero estadounidense Charles Lindberg hizo en solitario a través del océano Atlántico.